Tecate, Baja California, 19 de agosto de 2015- El Gobernador del Estado de Baja California, Francisco Vega de la Madrid, el Secretario de Hacienda y Crédito Público, Dr. Luis Videgaray Caso, y el Secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, presidieron la ceremonia de inauguración del primer parque eólico transfronterizo entre México y Estados Unidos, el cual tuvo una inversión aproximada de $300 millones de dólares y suministra energía eléctrica al condado de San Diego en California.
Los promotores del proyecto, InterGen e Infraestructura Energética Nova, S.A.B. de C.V. (IENova), directivos de San Diego Gas & Electric (SDG&E), el Banco de Desarrollo de América del Norte (BDAN) y la Comisión de Cooperación Ecológica Fronteriza (COCEF), entre otros, celebraron la conclusión de este proyecto denominado Energía Sierra Juárez 1, el cual tiene una capacidad de generación de energía de 155.1 MW y entró en operación comercial el pasado mes de junio.
La energía generada es comprada por la empresa eléctrica SDG&E, filial de Sempra Energy, que presta servicio a más de 2.25 millones de usuarios de energía eléctrica y gas natural en los condados de San Diego y Orange.
El financiamiento del proyecto se realizó a través de un sindicato de bancos que incluyó a Mizuho Bank LTD como banco agente, al BDAN como coordinador de los aspectos técnicos y financieros, y Nacional Financiera, S.N.C. Institución de Banca de Desarrollo (NAFIN), Norddeutsche Landesbank Girozentrale (NordLB) y Sumitomo Mitsui Banking Corporation (SMBC) como acreedores.
El proyecto, construido en aproximadamente 5,300 hectáreas de terreno ubicado en Tecate, consistió en el diseño, construcción y operación de un parque eólico que cuenta con 47 aerogeneradores, cada uno con una capacidad nominal de 3.3 MW y la construcción de una línea de transmisión transfronteriza de 7.7 kilómetros.
“Este primer proyecto transfronterizo de energía eólica es un modelo de colaboración entre ambos países” comentó Gerónimo Gutiérrez Fernández, Director Gerente del BDAN y agregó, “nos satisface enormemente haber contribuido en su realización y creemos que éste será el primero de muchos otros proyectos de energía binacionales para el beneficio de los habitantes de la frontera común”.
Los beneficios ambientales relacionados con el proyecto incluyen un desplazamiento de más de 125,809 toneladas métricas por año de dióxido de carbono (CO2) y 189 toneladas por año de óxidos de nitrógeno (NOx). Se espera que el proyecto genere electricidad equivalente al consumo anual de 70,832 hogares.